Misión
Somos un Colegio de EMTP, en el cual trabajamos colaborativamente para eliminar y/o disminuir las barreras para el aprendizaje y la participación; Desarrollamos estrategias para atender la diversidad y aplicamos un modelo de evaluación centrado en los procesos.
Somos un Colegio de EMTP, en el cual trabajamos colaborativamente para eliminar y/o disminuir las barreras para el aprendizaje y la participación; Desarrollamos estrategias para atender la diversidad y aplicamos un modelo de evaluación centrado en los procesos.

Visión
Ser reconocidos como una Comunidad Educativa inclusiva, que valora, respeta y promueve la diversidad –en un modelo social-, y que asegure una educación equitativa y de calidad.
Sellos institucionales
Historia
1990
El Colegio Comercial de Peñaflor nace en 1990 y fue creado con un propósito claro: responder a la alta demanda de técnicos especializados en cuero y calzado que requería la empresa CATECU S.A., BATA. Sin embargo, con la llegada de la globalización y la apertura comercial, la industria nacional del cuero y calzado comenzó a declinar, hasta desaparecer prácticamente del panorama económico nacional.
Frente a este nuevo escenario, el establecimiento reorientó su oferta educativa, transformándose en el actual Colegio Comercial de Peñaflor, con un enfoque técnico-profesional en las especialidades de Administración y Ventas.
2015
En 2015, el colegio dio un paso importante hacia una educación más inclusiva y accesible: se incorporó al sistema de gratuidad, eliminando el copago y los procesos de selección, y se adscribió a la Ley de Subvención Escolar Preferencial (SEP). Ese mismo año, se sumó al Programa de Integración Escolar (PIE), ampliando su compromiso con la diversidad.
2016
Desde 2016, nuestra comunidad educativa inició un proceso de reflexión y actualización del Proyecto Educativo Institucional (PEI), asumiendo el modelo social de la inclusión. Este proceso se ha inspirado en las orientaciones de la UNESCO (Educación 2030) y el Ministerio de Educación de Chile, avanzando hacia la construcción de una cultura escolar basada en políticas y prácticas inclusivas, que reconozcan y valoren a cada estudiante.
Hoy, seguimos formando con sentido, adaptándonos a los desafíos del presente y comprometidos con una educación técnico-profesional de calidad para todos y todas.